Si vinieron a japón, y pasearon por shoppings, deben haber notado la cantidad exorbitante de negocios de fruta fresca, empaquetada, en cajas, y sin dudas se quedaron maravillados por los precios sarpados, pero ¿por qué? Que carajo tiene de especial esta fruta?
Si, un ramo de uvas 250 usd, 3 mangos 300 usd, una locura, no?
Si bien, es posible conseguir fruta “relativamente barata” en el supermercado (digo relativo porque si lo comparas con Argentina te queres romper la cara contra la puerta), parte de la cultura japonesa considera la fruta como un regalo preciado que le podes dar a otra persona (o a uno mismo), en general se da para mostrar gratitud, o buenos deseos (por ejemplo si alguien se muda a una casa nueva, consigue un trabajo nuevo, etc, etc).
Pero esto no es todo, según la Asociación agricultural de japón, hay regulaciones sobre el color, el tamaño y hasta en el gusto, a diferencia de países grandes como argentina, el 80% de Japón es montaña y la mayoría de las granjas donde se recolecta fruta, son negocios manejados por familias chicas, es muy común viajar al interior del país y ver puestos en la calle donde venden ramos enteros de uvas o de la fruta de estacion a precios copados.
Incluso si vienen pueden pagar la experiencia de recolectar frutillas, arándanos u otras frutas y luego comerlos.
Tuve la suerte de probar algunas de estas frutas en eventos del trabajo, o en cenas, y la verdad que el gusto es increíble, pero no creo que viniendo de un país como Argentina nos haga la diferencia.
El negocio donde saque esta foto está en el shopping Midtown de Roppongi, pero van a encontrar negocios así en todos los malls del país.